Al pensar en el ballet, puede que pienses en movimientos del cuerpo y la libertad que sientes al bailar, pero también tiene mucho que ver con la disciplina y respeto.
Aquí algunas recomendaciones para mantener el orden, disciplina y respeto en el salón de clases.
1.- La puntualidad es clave. Llegar temprano es un punto clave para un bailarín, no se trata sólo de llegar "justo a tiempo" intenta llegar unos 15 minutos antes para poder calentar, estirar y prepararte con tiempo.
2.- Sé ordenado. Asegúrate de dejar tus cosas cerradas, y en un lugar donde no estorben.
3.- La ropa también baila. Si llevas uniforme respétalo y úsalo adecuadamente, si no, asegúrate de llevar ropa cómoda.
4.- ¡Apágalo y bailo! Nunca llegues a clases sin apagar tu celular o ponerlo en vibrador. Es una distracción y una falta de respeto hacia el maestro y su clase.
5.- Shh... Cuando el maestro esté dando alguna corrección, dictando un ejercicio o haciendo algún comentario, asegúrate de guardar silencio y no interrumpir. Si tienes alguna pregunta, pide permiso para hablar.
6.- Encuentra tu lugar. Si eres nuevo en la escuela o en un grupo, encuentra un lugar de acuerdo a tu nivel y conocimientos en donde no estorbes pero que te puedan ver y ayudar.
7.- Ensaya y respeta. Si no estás ensayando pero te quieres quedar a ver, pide permiso al maestro y siéntate en un lugar donde no estorbes.
8.- Con permiso. Si por alguna razón llegas tarde pide permiso para pasar. Lo mismo si te sientes mal o necesitas salir antes de la clase, no te vayas sin avisar.
9.- Advertencia. Si te lastimaste o te duele alguna parte de tu cuerpo, avísale a tu maestro, esto es importante para que sepa porque marcas los ejercicios o no tomas su clase.
10.- ¿Por dónde camino? Cuando termines un ejercicio o necesites cruzar el salón siempre hazlo por detrás ¡nunca cruces por delante del espejo! y recuerda que para cambiar de lado en la barra debes hacerlo por adentro.
11.- No mastiques, apunta. Mascar chicle en clase se considera una falta de respeto y es peligroso.
12.- Termina y no te desplomes. Cuando termines un ejercicio, haz alguna terminación, no pares de bailar hasta que el maestro lo indique. Nunca hagas gestos, quejas o comportamientos groseros.
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